hacer pan en casa

Hacer pan en casa: crea recuerdos y sabores inolvidables

Qué mejor forma de inaugurar esta nueva sección de nuestro blog, que dedicando un post a lo que más nos gusta: hacer pan en casa. Sabemos que para muchos de vosotros ya es una costumbre. En cambio, para otros sigue siendo una idea que todavía no se ha llegado a materializar. Aunque no nos cabe duda de que cuando ese momento llegue, puede que ya no haya vuelta atrás.

Los momentos y aromas que surgen alrededor del pan casero son únicos y especiales, por lo que siempre querrás repetirlos. Eso sí, para aprender a hacer pan casero sin morir en el intento debes tener en cuenta ciertos factores fundamentales. Por ejemplo, los tiempos de amasado, la temperatura del horno, el fermento de la masa, etc. Todas estas cuestiones son puntos muy delicados y que debemos controlar si queremos conseguir una masa de pan casero digna de compartir con nuestros familiares.

¡Quédate para conocer la mejor receta para hacer pan desde casa! En Harina Entrepiedras te explicamos cómo hacerlo fácil y rápido.

 

Cómo hacer pan en casa fácil y rápido

El acto de hacer pan en casa puede ser un reto si es la primera vez que te aventuras en esta experiencia. Es todo un proceso que requiere paciencia, prestar atención a los detalles, saber escoger los ingredientes y recetas adecuadas… No es tarea fácil, pero ¿y lo especial y gratificante que es hornear tu primer pan en casa? Toda esa espera y toda la metodología de prueba y error que ello conlleva, sin duda, merece la pena. Es más, te anima a seguir aprendiendo mientras experimentas con nuevas harinas y técnicas.

Pero si llenarte las manos de masa ya forma parte de tu rutina, hacer pan en casa se convierte en una tradición placentera, en una manera de desconectar. Y por qué no, en un hábito saludable. Ya no solo para la mente, sino también para tu cuerpo. Porque eligiendo los mejores ingredientes los resultados siempre son deliciosos, nutritivos y mucho más duraderos. Desde Harina Entrepiedras estamos seguros de que si ya has probado alguna de nuestras harinas, sabes a qué nos referimos.

Existen infinidad de recetas para hacer pan en casa, aunque hoy vamos a centrarnos en una fórmula fácil, rápida y muy sencilla de hacer. Sin demasiadas complicaciones, ni amasados largos o tiempos de espera eternos, para que tengas un pan casero de miga jugosa y corteza crujiente. Un pan que disfrutarás día a día y que incluso podrás congelar para disfrutarlo en cualquier otra ocasión que se preste. ¡Vamos a ello!

 

Ingredientes para hacer pan

Las cantidades que se exponen son para realizar una pieza de pan casero:

 

La hogaza que resulta de esta receta no necesita levado y en poco más de una hora estará lista para consumir. Si en el supermercado no encontráis levadura fresca, ésta se puede sustituir por 5 gramos de esta levadura seca de panadería. ¡El resultado será igual de bueno y esponjoso!

 

Receta paso a paso

1.- Primero de todo, vuelca en un bol la harina y deja un hueco en el centro para añadir la mitad del agua, la sal y el aceite de oliva virgen extra. Empieza a mezclar los ingredientes, hasta conseguir una masa compacta.

2.- Acto seguido, diluye en el resto del agua la levadura y añade la mezcla a la masa anterior. Cuando no puedas remover la mezcla en el bol, porque se volverá muy espesa, trabaja la masa con las manos durante unos 10 o 12 minutos. Para que el trabajo de amasados sea más fácil, espolvorea en la superficie de trabajo un poco de harina y engrásate las manos con un poco de aceite.

3.-  Forma una bola con la masa y colócala en la bandeja de horno, previamente pintada con un poco de aceite para que nos e pegue. Realiza dos cortes en la masa para que respire durante la cocción y llévalo al horno precalentado a 220ºC con calor arriba y abajo. Antes, cubre la masa con un recipiente apto para horno, tipo pyrex. Éste hará que el horneado tenga algo de humedad, subirá la masa y hará que la corteza de nuestro pan casero un color y un brillo especial.

4.- Pasados unos 45 minutos, sacamos el pan del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla de horno durante unos 20 minutos antes de consumir.

¡Compartir es vivir! Los beneficios del pan casero

En todo caso, si todavía estás iniciándote en el mundo de la panadería casera como si ya llevas años horneando tus propias hogazas con masa madre incluida, lo que está claro es que la mejor parte de hacer pan en casa es disfrutar de su proceso. Desde el momento en el que empiezas a amasar, solo o en compañía, pasando por las horas de espera para ver el resultado final, hasta el momento en el que lo sacas del horno, lo dejas enfriar y lo compartes.

Porque más allá de conquistar paladares, con aromas intensos como el centeno o sabores peculiares como el que se consigue con la pequeña espelta, el momento de reunirse alrededor de la mesa para disfrutar de una buena conversación y un buen pan, no tiene precio.

Hacer pan en casa también es una manera de poner en común distintas recetas y aquellas sensaciones que nos produce probar ese pan recién hecho, ya sea el primero o la especialidad de cada mes, y nuevas ideas para sorprender con nuevos sabores en próximas ocasiones.

Definitivamente, hacer cualquier tipo de pan en casa es una experiencia que comienza en el deseo por transformar algo tan sencillo como la harina, la sal y el agua en algo delicioso. Continúa con la pasión por los métodos artesanales y termina en la excusa perfecta para dar lugar a momentos únicos.

Y para ti, ¿qué es lo más especial de compartir un pan hecho en casa? Puedes contárnoslo escribiendo a info@harinaentrepiedras.com, estaremos encantados de intercambiar reflexiones sobre esta afición.

Harina Entrepiedras

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